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Cayó el telón del Primer Festival de Cine Feminista del Noa

Ayer entregamos los premios a todxs lxs ganadorxs y cayó el telón sobre algo que aunque termina, recién empieza.

Por MUJERES X MUJERES

Ayer entregamos los premios del Primer Festival de Cine Feminista del NOA y cayó el telón sobre algo que aunque termina, recién empieza.

Como Fundación organizadora, Mujeres X Mujeres explotó de felicidad. Y es que poder hacer, en este norte anacrónico, un evento de estas características no es fácil. El apoyo de la gente fue muy caluroso y lo percibimos tanto en la calidad y cantidad de cortos que recibimos para el concurso, como en el compromiso de voluntarias y voluntarios que respondieron con su tiempo y energías incondicionales para llevar adelante todo el back stage de un Festival, en el profesionalismo de las Talleristas que cada siesta transmitieron sus saberes, en el compromiso sincero de cada uno de lxs Juradxs que analizaron los cortos para elegir finalmente los mejores, en la buena onda con que cada una de las artistas que llevó su producción a la Feria, en la garra de cada Performance de la  noche y sobre todo, en la presencia alegre de quienes acompañaron la proyección de cada largometraje llegada la noche.

Llevar adelante proyectos feministas y pedir el apoyo del Estado no es fácil. Llevar adelante proyectos audiovisuales feministas y obtener financiamiento tampoco es fácil y ello quedó muy en claro en la Conferencia “Qué significa ser mujer audiovisualista hoy”.  Es difícil hacer foco en problemáticas propias, es complicado que nuestro ojo feminista no sea ocultado bajo un parche de supuesta “neutralidad” que es guardiana del ojo hegemónico masculino  y es sinuoso el camino que se abre para una mujer en el mundo del cine, donde los varones tienen la cámara por el mango, y al mango también.

Elegimos la imagen de Alice Guy para el Festival porque a pesar de haber rodado muchísimas películas su trabajo fue invisibilizado por ser ella una mujer. Fue borrada de la historia del cine como usualmente se borran nuestras historias, se silencian nuestras voces y se esconden nuestras imágenes.

En la Conferencia “Imagen de mujer” quedó en claro que también es complicado sacar el foco de  imágenes patriarcales de nuestras vidas que funcionan como cautiverios taquilleros. No hay una sola “mujer”, no existe afortunadamente. Tampoco hay una sola forma de ser feminista, o de pensar los feminismos. La diversidad de nuestras vidas, la desobediencia de nuestros cuerpos, la aridez de nuestras voces y la insurrección de nuestros paisajes así lo demostraron en cada toma que se proyectó en el Festival.

Pero ahí vamos las feministas sabiendo que lo personal es político, aprendiendo a usar las herramientas de la política y apropiándonos –desde nuestra histórica periferia- de espacios centrales de lo político.

Este Primer Festival fue un gran desafío para Mujeres x Mujeres, pero además de la satisfacción de saber que lo hicimos con la ayuda de muchísima gente, nos queda ese sabor dulce de sentir que nuestro NOA se despabila y también existe.

Habrá más sillas en el próximo, la misma cantidad de mosquitos seguramente y ojalá cada vez  más cortos para el Concurso. Porque el cine feminista tiene cosas que mostrar y el Norte tiene lugar para todxs.