La ESI ya es ley: Saquen sus rosarios de nuestra educación
En el día de la fecha se debaten en el recinto legislativo tucumano somete a discusión un dos proyectos de Ley que impulsan la Adhesión a la Ley 26.150 de Educación Sexual Integral. No confundamos, TUCUMÁN YA TIENE ESI.
La estrategia de los conservadurismos tucumanos que afloran en el jardín de la república es «re-debatir» los temas saldados para que no estemos nunca tranquiles con los derechos gantantizados. Se oyó que la responsabilidad parental está por sobre el derecho a la educación de les niñes, que la anticoncepción hormonal de emergencia es ilegal, que el matrimonio igualitario no se adecúa a la ley o que la identidad de género es binaria y biológica. Estos son sólo algunos de los ejemplos sobre cómo opera de manera reactiva esta moda fundamentalista de impugnar la soberanía sexual.
En el Art. 9 Inciso 13 de la Ley Provincial 8391 se establece incorporar a la propuesta educativa provincial la Educación Sexual Integral. Este articulo plantea que son fines y objetivos de la política educativa:
Incorporar a la propuesta educativa institucional la educación sexual integral, articulando los aspectos biológicos, psicológicos, sociales, afectivos y éticos. Cada comunidad educativa, en la elaboración de su proyecto institucional, adaptará las propuestas a su realidad sociocultural, respetando su ideario institucional y las convicciones de sus miembros conforme a lo establecido en la Ley de Educación Sexual Integral.
En un acto de llamativa ignorancia institucional, los legisladores provinciales Gonzalo Monteros y Sara Alperovich, los primeros días del mes de Marzo, presentaron dos proyectos de ley para adherir a la Ley Nacional de ESI (26.150).
En La Gaceta Play, Monteros planteó: «En Tucumán no hay ley, sino una adhesión al Programa Nacional de ESI. Por la resistencia que hubo en los proyectos anteriores es que planteamos que los contenidos deben salir del diálogo y teniendo en consideración a todos los sectores. Sobre todo involucrando los padres»
¿Involucrando a los padres? ¿En un derecho que ya es de les jóvenes?
«Se provee un ambiente institucional, con participación de las familias y los niños y niñas. (…) La ESI busca niñeces activas» planteó Sara Alperovich en el recinto el día de la fecha«Esta Ley busca que el estado y las instituciones educativas en articulación con las familias, cuide y oriente a las niñeces».
Cuando de involucrar a las familias y de desconocer la autonomía progresiva de les jóvenes se trata, nos preocupa hasta dónde puede llegar la imaginación de nuestros legisladores en Tucumán.
De hecho, sin ir más lejos y a modo ilustrativo de esta escandalosa muestra de displicencia ante las leyes vigentes, en el año 2018, un grupo de «Padres por el derecho a decidir» acudieron a la Justicia para tratar de frenar la implementación de la Educación Sexual Integral en las escuelas de Tucumán. Ocho personas interpusieron una denuncia penal contra los responsables de los ministerios de Educación y de Salud de la Provincia, acusándolos de presuntos “delitos de abuso de autoridad, instigación a cometer delito, violación de los deberes de funcionario público, corrupción de menores y apología del delito (aborto)”. El expediente N° 74.385/18 fue radicado en el Complejo 1° (fiscalía N° 1) del Ministerio Público Fiscal por el abogado Walter Marcelo Perdiguero.
Resulta muy preocupante que ni el propio Ministro de Educación de la Provincia, Juan Pablo Litchmajer conozca los estándares de derechos vigentes en la provincia que informan que la ESI ya es un derecho, ya que de acuerdo con La Gaceta «La adhesión a la ESI fue solicitada en marzo, de modo explícito, por el ministro de Educación, Juan Pablo Lichtmajer».
«Nuestro proyecto promueve los espacios para la participación ciudadana, como representantes de las religiones, padres, ONG» sostuvo el Legislador Monteros en el recinto el día de la fecha.
Hay un problema muy claro con respecto al papel de la religión en la definición de políticas públicas. Si habilitamos un debate en una mesa con estos sectores, muy posiblemente estemos minando una política publica que tardó mucho en consolidarse.
Entendemos que llevar al recinto este tema parte de la buena voluntad de un grupo legislativo, pero también de un gran desconocimiento. CUIDEMOS LOS DERECHOS DE LES PIBIS.