«El movimiento feminista es una gran actriz política»
El 17 de Septiembre hicimos las Jornadas "El movimiento feminista y la salud de las mujeres" en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Tucumán. Acá la entrevista a Danila Suárez Tomé -Economía Feminista- que habló sobre la mirada androcéntrica de las ciencias
Por Florencia Sabaté
Daniela Suárez Tomé es Profesora y Doctoranda en Filosofía por la Universidad de Buenos Aires. Trabaja como docente en las materias Gnoseología, Problemas Especiales de Gnoseología y Filosofía Feminista en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA. Realiza su doctorado en el Centro de Estudios Filosóficos de la Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires con una beca interna doctoral del CONICET. Se especializa en la teoría del conocimiento en general, desde una perspectiva fenomenológica, existencialista y feminista en particular. Es coordinadora de teoría feminista en Economía Femini(s)ta.
MxM: ¿Qué tema de salud de las mujeres, aparte de la despenalización del aborto, ves pendiente en la agenda política?
D: “Bueno… en general todo lo que tiene que ver con derechos sexuales y reproductivos, que no es simplemente el aborto, sino también métodos anticonceptivos, partos respetados, todo lo que tiene que ver con la educación sexual integral. No solo cuestiones relacionadas con la reproducción, sino también cuestiones relacionadas con conocer nuestros ciclos menstruales… que no tenemos mucha información en el colegio o cuando vamos a la ginecóloga. Es conocer sobre los diversos métodos anticonceptivos.”
MxM: ¿Cómo juega el movimiento feminista en la construcción de esta agenda política?
D: “El movimiento feminista se constituyó hoy en día como una gran actriz política, a pesar de tener disputas internas sobre diversos temas, lo cual es completamente positivo y normal en todo proceso emancipatorio. El movimiento feminista tiene historia, pero sin embargo desde el 2015 es cada vez más visible este proceso de conquistas, tanto material o simbólicas. Estamos también logrando, paulatinamente, cambios dentro de lo legislativo.
Así que el movimiento feminista es una gran actriz política entre lo que es la conformación de la agenda nacional, no solo con tema de las mujeres, pero nos hemos ganado un espacio central en lo que tiene que ver con políticas del futuro.
En este sentido creo que es mucho más amplio que lo que tiene que ver exclusivamente con las mujeres, sino que es una nueva mirada de cómo hacer políticas en el país.”
MxM: ¿Cuál es el rol de la cuarta ola en la construcción de la agenda política?
D: “Bueno justamente es un poco más de lo mismo, si se habla de la revolución de las hijas -yo creo que realmente lo podés ver a nivel global en lo que es el feminismo latinoamericano- Argentina es realmente vanguardia. Este es un movimiento que no se ha quedado sólo en lo teórico, sino que ha propulsado una agenda política particular y que está en pugna con otros espacios dentro del juego democrático. Entonces eso me parece súper interesante, súper fundamental y siento que acá
estamos realmente en una etapa de ebullición que va a ser muy prospera, que dejan esperanzas de construir una democracia más inclusiva».
MxM: ¿Crees que las violencias en la salud son una preocupación del estado?
D: “Las violencias, en general, deben ser una preocupación del estado ya que es este quien debe garantizar que todas las personas vivan libres de violencia, no solo las mujeres. En los espacios de salud esto es fundamental porque es el momento en el que estamos más vulnerables como seres humanos.”
MxM: ¿Qué tan naturalizadas están las violencias en la formación universitaria? ¿ Hay una responsabilidad de la universidad en ese tema?
D: “Desde el feminismo sostenemos que no puede existir una teoría abstracta que quede completamente por fuera de lo que es la mejora de las condiciones de vida de las personas. En este sentido,
todo el conocimiento que se genera tiene que poder ser de alguna manera provechoso para poder cambiar nuestras condiciones de vida
y en ese sentido, las articulaciones entre la teoría y la práctica, la legislación, los movimientos territoriales siempre es algo que es deseable para poder trascender la mirada androcéntrica de lo que es el conocimiento”